Comentario del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos Volker Türk con anterioridad al 30º aniversario del genocidio de 1994 cometido contra los Tutsi en Rwanda

Con anterioridad al 30^º aniversario del genocidio de 1994 cometido contra los Tutsi en Rwanda, lamento hoy los más de un millón de hombres, mujeres y niños quienes fueron asesinados a sangre fría en apenas 100 días, siendo la amplia mayoría de ellos Tutsi, y algunos Hutu, Twa y otros cuantos los cuales se opusieron valientemente al genocidio.   No debemos olvidar nunca a las víctimas.

También quiero saludar a los cientos de miles de supervivientes por su valentía mostrada.  Su búsqueda incansable de justicia, unidad y reconciliación a lo largo de varias décadas debe servirnos a todos de inspiración.  

Insto a todos los Estados a redoblar sus esfuerzos para llevar ante la justicia a todos los presuntos autores que sobrevivan, incluso haciendo uso de la jurisdicción universal, y a combatir el discurso de odio y la incitación a cometer genocidio.  Puede que el genocidio de Rwanda se desatara el 7 de abril de 1994, pero este tiene sus raíces en años y años de odio deshumanizador, incitación y discriminación.

Los trágicos acontecimientos de 1994 en Rwanda deben quedar grabados para siempre en la consciencia de la humanidad y servir de recordatorio constante de la necesidad de que los Estados hagan todo lo que está en su poder para prevenir el crimen de genocidio en todo el mundo.