La desconexión de Internet causa daños incalculables: informe de las Naciones Unidas
27 junio 2022
Un hospital no consigue contactar con un doctor para una cirugía de urgencia. Votantes no consiguen acceder a información sobre candidatos durante una elección. Estudiantes que no pueden llegar a exámenes de acceso a programas académicos. Atrocidades cometidas en zonas de conflicto de las que no se puede informar.
Estos son solamente unos pocos ejemplos del profundo daño para las vidas diarias y los derechos humanos de millones de personas causado por los cierres de Internet impuestos por los gobiernos, según advierte un nuevo informe de la Oficina de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
El informe, Cierres de Internet: Tendencias, causas, implicaciones legales y repercusiones para una serie de derechos humanos, aspira a arrojar luz sobre el fenómeno de los cierres de Internet, analizando cómo estos llegan a socavar una serie de derechos humanos, principalmente el derecho a la libertad de expresión. El informe detalla cómo los cierres debilitan el desarrollo y cómo algunos gobiernos usan esta medida cada vez más para detener las protestas y silenciar la disensión.
"A la vez que los cierres de Internet afectan profundamente a muchos derechos humanos, estos repercuten de manera más inmediata sobre la libertad de expresión y el acceso a información, uno de los pilares de las sociedades libres y democráticas y una condición indispensable para el pleno desarrollo de la persona," indica el informe.
Conforme avanza la digitalización de las sociedades, irán aumentando las repercusiones de los cierres de Internet para las vidas de las personas, añade el informe, lo que acarreará un enorme coste para el empleo, educación, atención sanitaria, nivel de vida, participación política y la vida social y cultural.
"Los cierres de Internet han empezado a surgir a la vez que el mundo digital ha ido cobrando cada vez más importancia, en realidad una importancia vital, para la realización de numerosos derechos humanos. La desconexión de Internet causa daños incalculables, tanto materiales como en cuestión de derechos humanos," afirmó la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet.
Los Estados deben por lo tanto abstenerse de desconectar Internet, insta el informe.
Repercusiones para las elecciones
El informe señala que la coalición #KeepItOn, la cual vigila episodios de cierre de Internet en todo el mundo, documentó 931 cierres entre 2016 y 2021 en 74 países distintos, en los que algunos países bloquearon las comunicaciones de forma repetida y durante períodos largos de tiempo. Todas las regiones del planeta experimentaron cierres múltiples, aunque la mayoría de los cierres que contempla el informe ocurrieron en Asia y África.
El informe añade que casi la mitad de todos los cierres registrados por grupos de la sociedad civil durante estos seis años fueron aplicados durante protestas y en medio de tensiones políticas para sofocar las manifestaciones acerca de un enorme abanico de reivindicaciones sociales, políticas y económicas.
Los cierres afectaron a al menos 52 elecciones entre 2016 y 2021. Solamente en 2019, los gobiernos de 14 países africanos interrumpieron el acceso a Internet durante períodos electorales.
Este fue el caso de Zambia, donde se celebraron elecciones presidenciales en agosto de 2021 en un entorno con leyes aprobadas deprisa y corriendo sobre el espacio cibernético destinadas a restringir Internet, afirmó Susan Mwape, fundadora y directora ejecutiva de Common Cause Zambia, una organización que aspira a promocionar la participación ciudadana.
Mwape declaró que servicios como WhatsApp, Twitter, Facebook e Instagram habían resultado afectados, con el resultado de que se había debilitado el acceso a herramientas digitales fundamentales para hacer campaña política y promover el debate público.
«Estas leyes sobre el espacio cibernético tenían la intención de utilizar a Internet como arma y de hacer callar las opiniones contra el gobierno,» aseguró Mwape.
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Lo que este informe claramente destaca es que se necesitan medidas rápidas para acabar con los cierres de Internet, incluso mediante la elaboración de informes más visibles sobre sus consecuencias, con una mayor transparencia por parte de las empresas que participan en estos cierres, y asegurándonos de que todos defendemos una conectividad libre de interrupciones auto-impuestas
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Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos Michelle Bachelet
El informe subraya que los cierres han evolucionado desde los apagones completos a interrupciones más focalizadas, gracias a las nuevas herramientas digitales y tecnologías de vigilancia. Los gobiernos recurren cada vez más a «estrangular» el ancho de banda, o a limitar los servicios móviles a 2G, lo que limita un uso más extendido de Internet.
Raya Sharbain de la Asociación Jordana de Código Abierto (JOSA, según siglas en inglés), una organización sin ánimo de lucro que promueve los derechos digitales en Jordania, explicó que algunos países que aplican controles sobre la libertad de expresión usan leyes formuladas de forma vaga para restringir las comunicaciones y a menudo no informan al público sobre las intervenciones que implementan.
«Los cierres pueden resultar difíciles de detectar, cuando recibimos quejas de que se están ralentizando las comunicaciones durante una protesta tenemos que llevar a cabo un análisis técnico para identificar qué servicios están siendo afectados,» declaró Sharbain.
Trabajo humanitario y atrocidades
El informe también ofrece ejemplos de las repercusiones de los cierres de Internet para el trabajo humanitario. En Somalia, trabajadores humanitarios denunciaron que los cierres de Internet habían perjudicado la ayuda humanitaria vital para salvar vidas. En Myanmar, los cierres habían puesto en peligro a las organizaciones de ayuda locales.
En zonas afectadas por conflictos, el bloqueo del acceso a herramientas digitales que se usan para documentar y denunciar abusos puede haber contribuido al incremento de la violencia, incluyendo a atrocidades, señala el informe. Algunos cierres pueden haberse aplicado con el intento deliberado de encubrir violaciones de derechos humanos, añade el informe.
Debido a la cada vez más generalizada dependencia de las empresas y del comercio de las tecnologías digitales, las interrupciones de los servicios de comunicación tienen graves consecuencias para la economía, debilitando el envío de remesas y empujando a las nuevas empresas a la ruina, advierte el informe. El Banco Mundial calculó recientemente que los cierres de Internet solamente en Myanmar habían costado casi 2,8 miles de millones de dólares entre febrero y diciembre de 2021, echando por tierra los avances conseguidos la década anterior.
Cierres y el camino a seguir
El informe aborda las distintas maneras en que las empresas, las agencias de cooperación para el desarrollo y la sociedad civil pueden ayudar a hacer más difícil que sigan ocurriendo cierres.
El detener los cierres de Internet ha de concebirse como un ingrediente fundamental en los esfuerzos en todo el mundo para reducir la brecha digital, subraya el informe.
Un paso vital para acabar con los cierres es garantizando una mayor visibilidad cuando éstos ocurren y mientras ocurren. El informe apunta a la necesidad de mejor información a tiempo real sobre los diferentes tipos de cierres, además de recomendar la creación de un mecanismo de colaboración para recopilar información sobre estas interrupciones.