Gaza: Türk se muestra horrorizado por la pérdida de vidas en un campamento tras ataques israelíes

GINEBRA (27 de mayo de 2024) - El Jefe de Derechos Humanos de las Naciones Unidas Volker Türk se mostró horrorizado por la nueva pérdida de vidas civiles en Gaza, después de que ataques aéreos israelíes llevados a cabo el domingo pasado golpearan un campamento de desplazados en la ciudad sureña de Rafah.

«Las imágenes recibidas desde el campamento son atroces y demuestran que los métodos y medios de guerra usados por Israel, los cuales ya han conducido a un número elevado de muertes de civiles, no parecen haber cambiado,» afirmó Türk.  «El ataque del domingo pasado viene a subrayar una vez más que no existe ningún lugar seguro en Gaza.

El 26 de mayo, grupos armados palestinos lanzaron una gran oleada de cohetes hacia Tel Aviv en Israel, produciendo aparentemente heridas leves a varias personas.  Unas pocas horas más tarde, municiones lanzadas desde un avión israelí alcanzaron un campamento en la zona de Al Hashash en Rafah. Informes sobre el terreno indican que se produjeron varias explosiones y se declararon varios incendios.  Supuestamente esta zona servía de refugio a personas que habían sido desplazadas del norte de Gaza.

Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF, según siglas en inglés) declararon que el objetivo del ataque eran «altos cargos de Hamas», y que sabían por informes sobre el daño a civiles a resultas de los incendios que estos ataques provocaron.

«Tengo en cuenta que las IDF han anunciado una revisión sobre los hechos, pero lo que es escandalosamente evidente es que al atacar esa zona, la cual está densamente poblada de civiles, se podía predecir el resultado que hemos visto.  Es indispensable que esta revisión conlleve rendición de cuentas y cambios en la política y prácticas que se están llevando a cabo,» exigió el Alto Comisionado.

«Solicito a Israel que detenga su ofensiva militar en la Gobernación de Rafah, tal como ha ordenado la Corte Internacional de Justicia (ICJ, según siglas en inglés).

El 24 de mayo, la ICJ ordenó a Israel detener su ofensiva así como cualquier otra operación en la Gobernación de Rafah que pudiera conllevar «la destrucción física» del grupo palestino en Gaza.

El Alto Comisionado hizo una vez más un llamamiento a todas las partes en el conflicto a instaurar una cesación del fuego, dado el imperativo de proteger a la población civil.

«Los grupos armados palestinos deben detener el lanzamiento de cohetes los cuales son intrínsecamente indiscriminados y suponen una violación flagrante del derecho internacional humanitario. Deben también poner en libertad de manera incondicional y urgente a todos los rehenes,» aseguró Türk.

«Israel debe adoptar medidas inmediatas destinadas a proteger a los civiles, y asegurar que cuentan con acceso a asistencia humanitaria esencial, además de poner en libertad a todas las personas detenidas arbitrariamente.»